Redes Sociales y Emergencias en Librería Cuesta


Será muy pronto cuando tendremos el privilegio de contar en la República Dominicana, con uno de los eventos más importantes de marketing político en la región, organizado por un grupo bien nutrido de profesionales y asesores de gobierno que desde el año 2010 re reúnen para debatir las estrategias y políticas públicas que desde la comunicación dinamizan el quehacer de los Estados, pero que además suelen compartir con un público que siempre supera los dos mil participantes. 

Daniel Ivoskus, argentino y presidente del comité organizador internacional de la Cumbre Mundial de Comunicación Política, cuya sede de celebración va rotando por diferentes países de Latinoamérica, ya comienza a agotar una agenda de visitas a Santo Domingo. Su trabajo, para nuestra alegría, coincide con la próxima fecha de presentación  del libro #SoyPreventivo: Redes Sociales, Seguridad y Emergencias” de ediciones UNICARIBE, el cual ya se encuentra disponible en Librería Cuesta y que de seguro también podremos presentar en el marco del evento internacional. 

Por eso será este viernes 30 de enero cuando podremos contar con la honra de su acompañamiento en esta actividad, así como las autoridades universitarias, diplomáticos, colegas y amigos invitados, quienes se darían cita a partir de las 6 de la tarde en los espacios de esta concurrida Librería, ubicada en la avenida 27 de Febrero esquina Abraham Licoln de esta capital.  

Para quienes nos han consultado, queremos avanzar que el libro #SoyPreventivo: Redes Sociales, Seguridad y Emergencias” inicia en el primero de sus capítulos con el sonido de diferentes voces surgidas desde varios escenarios, que de una u otra forma están “enredados” (en el buen sentido de la palabra) con el tema de la comunicación en medio de situaciones de crisis.

El contraste que surge entre las diferentes opiniones, que provienen desde personalidades tales como el Almirante Sigfrido Pared Pérez, ex Ministro de Defensa, el Mayor General retirado Luis Antonio Luna Paulino, los profesionales de la comunicación Alicia Ortega y Manuel Quiroz, así como de autoridades universitarias y jóvenes profesionales en diferentes áreas, hacen reflexionar sobre el impacto que tendrían las redes sociales, en la expansión de una cultura de prevención de desastres.

A menudo se percibe, que por Facebook, Twitter o Instagram, estamos unidos unos a otros, pero en realidad no nos comunicamos como deberíamos, subutilizamos la tecnología aún y cuando ocupa un lugar importante en nuestras vidas y realmente necesitamos de una comunicación real para fortalecer y mantener viva cualquier relación en medio de los desastres.

Sin dudas, hay que entender los nuevos cambios que plantea la era digital en las relaciones humanas y en la cobertura de situaciones de emergencias. Debemos ser conscientes de que ha surgido un cambio de psiquis en el que los usuarios para estos tiempos, difícilmente pueden vivir sin caer en la desesperación, cuando no se conecta al Internet.

Recuerdo en el libro “Vivir Conectados” del argentino Daniel Ivoskus (2010), quien si Dios lo permite nos honrará con su presencia en la próxima presentación del libro (viernes 30 de enero 6PM en Librería Cuesta), que aunque el pulgar no fue concebido para “comunicar”, es el reino de “este dedo gordo” sobre los teléfonos digitales, lo que más simboliza a la actual tecnología masificada.

Los cibernautas post Internet 1.0, aquellos que protagonizaron el ingreso al tridimensional mundo de la Web 2.0, 3.0 y sus sucesivas generaciones, tuvieron que ser re alfabetizados a la velocidad del chip. La red se nutrió de “inventos” que modificarían sustancialmente los hábitos adquiridos por el primer ser digital. A partir de ellos, el usuario se convirtió en protagonista, hacedor y artífice de la telaraña más grande e importante del mundo.
 

Así que, las tecnologías de la información y las comunicaciones muestran todo su potencial, pero resultan insuficientes sin la contribución de otros múltiples actores. En fin, la lucha contra los desastres y la minimización del riesgo, significa un compromiso serio, puesto que están en juego la vida y los medios de subsistencia de un sector importante de la población mundial; sin embargo, es en buena parte responsabilidad de los gobiernos aplicar adecuadas políticas públicas, asignando competencias y recursos al ámbito local, donde se materializan las medidas adoptadas para hacer frente a las amenazas naturales.

Ahora bien, hay que reflexionar, que es necesaria y urgente, la suma de voluntades, vengan de donde vengan, trabajando todas para un mismo fin educativo, cuyas propuestas derivadas puedan permear las políticas públicas existentes y dirigir luego, las iniciativas también desde el ámbito universitario (ya que se habla mucho del componente educativo en la prevención del riesgo). 

Vivimos en tiempos donde el virus Chikungunya está causando estragos, ni hablar del Ébola en el África, aquí en Santo Domingo se acaba de instalar un Sistema Nacional de Emergencias y que funciona con el número de asistencia telefónica 911, y estamos a la puerta de una nueva temporada ciclónica, en una realidad también virtual, donde todo debemos trabajar con un sentido colaborativo, de prudencia y alto sentido de altruismo.

Dios los Bendiga!!!…

Ceinett Sánchez 

HAITÍ: Un terremoto y un desastre que no ha pasado.

Este lunes se conmemora el quinto aniversario del terremoto que mató a 316 mil haitianos y obligó al desplazamiento de otro millón y medio,  una tragedia que también volcó la solidaridad internacional, en especial  de la República Dominicana.
Ahora hay muchas preguntas que deben llevarnos a la reflexión: ¿qué ha pasado durante todo este tiempo? ¿hasta dónde se miden las consecuencias de una migración ecológica que lleva al gobierno dominicano a cargar con casi toda, para no decir, toda, la responsabilidad en la entrada y deportación de haitianos ilegales? ¿hasta cuando la comunidad internacional asegura invierte millones de dólares en ayuda humanitaria cuyos resultados no se reflejan en la realidad de este país, el más pobre del hemisferio occidental?
Las respuestas serían muchas, muy posiblemente todas serían firmemente defendidas por las partes interesadas en este conflicto histórico, pero como no hay verdades absolutas en estas realidades complejas y hostiles, hoy al recordarse cinco años de la tragedia, antes de hacer juicios propios, he preferido recoger algunas afirmaciones recogidas por el colega Ramón Pérez Reyes del periódico dominicano Listín Diaro.
Aprovecho para insistir, en que en toda comunicación de crisis y sobre todo si aborda temas que involucran a la gestión del riesgo,  la prevención debe llevar la bandera siempre y motivar a la reflexión sobre todo entre quienes vivimos en esta Isla Hispaniola, donde compartimos territorio con el pueblo haitiano, y también donde poco se conoce sobre seguridad sísmica!!!...Aquí les dejo:
"Para muchos, el proceso de reconstrucción durante estos cinco años ha sido extraordinario. Otros dicen que aún queda mucho por hacer.
La fecha encuentra a Haití a punto de un “terremoto político” debido a la crisis política que tendría su desenlace a partir de esta semana, cuando formalmente inicien las primeras actividades de 2015.
 De los 1,5 millones de haitianos que  fueron desplazadas en campamentos  por este sismo, hoy quedan menos de 100.000 y más del 90 por ciento de los 10 millones de metros cúbicos de escombros se ha borrado de las calles”,  según datos ofrecidos para la ocasión por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Haití.
La oficina destaca,  como esfuerzo para este logro,  el aporte de su población,  las políticas públicas de reconstrucción y la ayuda internacional.
“La reconstrucción es un proceso que debe contar más que las donaciones con  la inversión extranjera.  Se han hecho pequeños avances. Por otro lado, con más de dos mil millones de dólares en remesas, la diáspora es un potencial subutilizado en Haití. Con el fondo nacional para la educación se ha visto que ella si  puede participar en la reconstrucción.”, dijo el presidente de la Fundación Zile, Edwin Paraison, quien en la ocasión fue coordinador de la gestión de ayuda humanitaria.
El secretario general adjunto de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Albert Ramdin, presidente del Grupo de Amigos de Haití,  explicó ayer que desde 2010, el 94% del total de hogares desplazados fueron reubicados, y destacó como hecho positivo que “la eliminación de escombros haya dado paso a la reconstrucción, al mejoramiento de la infraestructura, al crecimiento económico y a la creación de empleo”.
 “Más niños van ahora a la escuela que antes y los indicadores de salud mejoran”, apuntó Ramdin en su mensaje de saludo al pueblo y al gobierno de Haití en esta fecha, que también envió el  secretario general del organismo,  José Miguel Insulza
El embajador Ramdin sostuvo que “el trabajo duro que se ha realizado en los últimos años ha producido resultados concretos, que se deben celebrar, no hay que perder de vista todo lo que falta por realizar todos unidos”.
El presidente del Comité Especial del Episcopado de Estados Unidos (USCCB) para atender a Haití, Mons. Thomas Wenski, aseguró ayer  que “después de cinco años, podemos decir que la reconstrucción acaba de comenzar, no de terminar. Hay mucho que hacer”.
CENTRO ESTUDIOS
Donación Dominicana
A parte de toda la asistencia, el presidente Fernández prometió y construyó  una universidad  en la comunidad de Limonade, cerca de Cabo Haitiano, la segunda ciudad más importante de Haití, a 255 kilómetros al norte de Puerto Príncipe, con una inversión de  US$50 millones de dólares.
El centro de altos estudios fue entregado el 12 de enero del 2012, dos años después del terremoto. Con la donación del centro, construido con recursos del Estado ascienden a cientos de millones de dólares las donaciones hechas por el gobierno dominicano a su vecino más cercano.
MEJOR RELACIÓN
Dominicanos en Haití
Manuel Estrella destaca que la ayuda brindada por los dominicanos después del terromoto ha ayudado para una mejoría en las relaciones entre los dos pueblos
Dijo que eso ha mejorado la situación de los criollos que tienen que trabajar en el vecino país.
“Antes, las empresas dominicanas en Haití no éramos bién vistas. Había una cultura histótica anti dominicana, que se rompió con la actitud del entonces presidente Fernández con el terromoto”, explicó..
Considera que lo que está ocurriendo ahora son solos tensiones: una migratoria y otra comercial, pero no es una actitud del pueblo haitiano, hacia los dominicanos
PARAR QUEJAS
Solución Política
Paraison dice que es tiempo que los haitianos cambien el curso de las cosas pues a cinco años del terremoto no “podemos seguir con los mismos lamentos respecto a la ayuda internacional mal canalizada o utilizada”
Ciertamente la reconstrucción ha sido lenta pero en los Estados Unidos aun no han terminado la reconstrucción de la “zona cero”  tras el atentado a las torres gemelas del 2001. dice
Las dificultades  políticas de hoy no ayudan a la reconstrucción, dice
“Los actores políticos deben buscar una solución urgente y viable a la crisis de gobernalidad”.   
CÓLERA Y COMICIOS
El pedido de la OEA
Desde el  2010 Haití está inmerso, en un brote de cólera que hasta 2013 había provocado más de 9.000 muertes y más de 635.000 casos .

La OEA  indica que “para el beneficio de la población, es más que necesario que todos los actores de la nación unan sus esfuerzos y logren ponerse de acuerdo con los compromisos necesarios, con el fin de preservar los logros y garantizar un desarrollo duradero en Haití. Esto es tanto más urgente a medida que se acerca la fecha límite para resolver la crisis política que aflige a las instituciones democráticas”.